Alineado con la robusta promesa de sostenibilidad de la organización Germán Morales Hoteles, EK Hotel avanza con acciones ciertas en su propósito de ser un espacio cada vez más sostenible. Ahora se une a la tendencia mundial de disminuir el uso indiscriminado de botellas de plástico al disponer de una botella de vidrio en cada habitación que es recargada con aguas saludables cada día. Las botellas de plástico fueron erradicadas del hotel.
«Evitamos el consumo de, mínimo 70 botellas de plástico correspondiente a cada una de las 70 habitaciones del hotel, suma que en el cambio de huéspedes en un día puede ser más alta aún», dice Juan Carlos Mayer director del hotel que inició también en el bar el suministro de agua desde un dispensador. «Esto ayuda a crear hábitos», dice.
Los hoteles de las marcas hb, bs, be y Ek de la cadena GMH habían realizado ya la sustitución de los envases plásticos de jabón y champú por dispensadores de pared. En el pasado muchas botellitas terminaban en la basura y desechadas con bastantes restos del contenido pues muchos huéspedes las desechaban a medio usar.
En la actualidad, EK Hotel forma parte de los hoteles que lideran la ocupación de la zona de la ciudad en la que está ubicado – esquina de la calle 90 con carrera 11- con cierres mes hasta del 85% de huéspedes que en su mayoría corresponden a visitantes extranjeros en un 65% y nacionales en 35%.
Para el hotel socializar su promesa de sostenibilidad es muy estimulante. ‘Trabajamos con todo el equipo creando conciencia porque es un problema moral’, dice Mayer, un convencido de la colaboración a todo nivel para detener el daño ambiental. «Tenemos un programa de reducción de desperdicios de alimentos, de consumo, trabajamos en los procesos para que nuestro equipo sea eficiente con conciencia ecológica», argumenta.
Para el ahorro de agua el hotel cuenta con una planta de tratamiento de aguas lluvia, con la que surten los sanitarios de las habitaciones; también se usa para el lavado de pisos, lo que se traduce en un ahorro en consumo de agua de un 30%.
El control del consumo de energía eléctrica es eficiente gracias a un estricto calendario de mantenimientos preventivos de equipos, garantizando su funcionamiento para optimizar su consumo. Toda la iluminación del hotel es led.
La relación personalizada con los huéspedes permite socializar nuestras campañas para minimizar el impacto del lavado de la lencería y las toallas, resume el director del hotel, que aprecia la respuesta de los huéspedes de no exigir cambios de toallas, por ejemplo, cuando no es necesario.